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Kristen Stewart y su habitual expresividad |
La revista U-likeit y el Hotel Hyatt de Buenos Aires nos invitaron a la avant première de Blancanieves y el Cazador. Los convido a repasar la estética de las prendas femeninas y la competencia en belleza de ambas protagonistas, Kristen Stewart y Charlize Theron. Y a compartir mi crítica no especializada.
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Inquietante reina Mala |
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En el bosque encantado, pelambre despeinada y minitrenzas |
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Charlize Theron con corana punkie |
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Excesiva evocación de Juana de Arco |
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El baño de leche |
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Colleen Atwood, impecable vestuarista junto a la capa de cuervos |
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El vestido de novia de la Reina Mala |
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La ropita de Blancanieves |
Como siempre que nos invita Yu Shen, sabemos que la vamos a pasar bien. Me encantan los cuentos de hadas, en particular los románticos donde el beso de un galán puede solucionar muchos males.¡Ah, si ocurriera en la realidad! Bien, en cuanto apareció Charlize Theron -no es santo de mi devoción- comprendí que Kristen Stewart debería hacer muchos méritos para opacar su belleza gélida. Helada también es la ex vampiresa, pero es apenas bonita, en mi opinión. He oído que la Theron estaba sobreactuada. No imagino una Reina Mala a quien no se le note la maldad. En cambio Blancanieves no llenaba los requisitos, debe haber mentido en el CV. La verdadera era muy blanca, no grisácea como K.S., de cara redonda como la manzana, mejillas sonrosadas y labios carnosos y colorados. Tuve algunas compañeras en la escuela con estas características, incluso una tía a quien llamaban Blanca aunque ese no era su nombre verdadero.
K.S. tiene la cara flaca, no tiene mejillas infladas, el pelo -aunque oscurecido- no era tan negro y los ojos son claros. Bueno, igual la aceptamos. Pero admitamos que solo tiene dos expresiones: boca cerrada y boca abierta, mostrando paletas de conejo muy bonitas. Cuando muerde la manzana envenenada, realmente compite en mala actuación con nuestra Calu Rivero en ocasión de actuar (?) un ataque de pánico en Dulce Amor. K.S parecía haber tragado un hueso de pollo, yo estaba por ofrecerme para hacerle la maniobra de Heimlich. Bien, cuando despierta, se ha convertido en la versión de Juana de Arco de Mila Jovovich -no precisamente la mejor actuada-. Mucho grito, arenga medio flojita, pero un peinado interesante y buena armadura. Igual la queremos porque nos ganó el corazón en Crepúsculo.
El vestuario realizado por Colleen Atwood es maravilloso. Deslumbrante y funcional a las escenas tenebrosas de la Reina Mala, y muy adecuado en el caso de Blancanieves. El resto impecable, actuaciones, vestuario, reconstrucción. Nos gustó mucho, la disfrutamos y nos encantó llevarnos una manzana colorada que nos regalaron a la salida.
¡Bravo, Patricia! ¡Muy buena tu crítica NO especializada? Y el cazador, ¿no participó lo suficiente como para figurar? ;))))))))
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